Diócesis de Neiva: “alimentar con amor”
Desde siempre, la Iglesia Católica se ha preocupado por la población más vulnerable, es por ello que la Diócesis de Neiva lidera diversas iniciativas caritativas en la región, como los programas de mejoramiento de viviendas, asistencia a personal vulnerable y el Banco Diocesano de Alimentos, que está compuesto por varias acciones sociales como: Alimenta Compartiendo, desayunos saludables, atención a familias venerables, a adultos mayores y el Programa Reagro.
En el marco de la pandemia a causa del Covid-19, la Diócesis ha intensificado estas acciones, sobre todo, aquellas relacionadas con el Banco de Alimentos, ya que, según comenta el padre Fernando Emilio Álvarez Muñoz, director de la Pastoral Social, las solicitudes de ayudas han aumentado un 85%.
En cuanto a la actividad de Reagro, esta consiste en ir al campo y concientizar a las personas sobre la buena obra que ellos pueden realizar donando los productos que cultivan y que ya no serán comercializados, aporte que va dirigido a las familias más necesitadas y se entrega por medio del Banco de Alimentos. Con esto, la jurisdicción eclesiástica de Neiva lucha por combatir el hambre, reducir el desperdicio de comida y alimentar con amor.
“La Iglesia en su acción evangelizadora y social, tiene la acción caritativa para con los más necesitados, esto no es nuevo, siempre hemos estado en favor de los más vulnerables porque el evangelio nos lleva a compartir de lo que nos vamos instruyendo tanto a nivel espiritual como material. Además de vivir su fe, el cristiano tiene un objetivo de acción caritativa y hace parte de la misión de la Iglesia”, asegura el padre Emilio Álvarez Muñoz.
Desde la obra de la Pastoral Social, la finalidad es la evangelización, el culto y la promoción social, ayudando a los más necesitados en pro de la seguridad alimentaria de la región, promocionando el espíritu solidario y los valores tanto humanos como culturales. Con esto, se contribuye en la reducción del hambre material y espiritual en las comunidades.
De acuerdo al director del Secretariado Diocesano de Pastoral Social, “hemos llegado a las zonas vulnerables a través de las parroquias de la ciudad de Neiva y de otros municipios, también a asentamientos, fundaciones que trabajan con niños, adultos mayores y mujeres gestantes, son como 25 las que están vinculadas a la obra del Banco y con ellos hay una alianza que nos permite llegar a otros sectores ya focalizados”.
Para que todo esto sea posible, la Diócesis de Neiva cuenta con aproximadamente 10 personas que laboran en el Banco de Alimentos y en la Pastoral Social, además de voluntarios que se han unido para ayudar a los más necesitados. Asimismo, han contado con el apoyo de la Cámara de Comercio, Abaco, medios de comunicación, Alcaldía Municipal, Gobernación del Huila, miembros del Ejército Nacional y la Policía local, fundaciones y empresas privadas.
Y como el distanciamiento debe ser solo físico, esta jurisdicción eclesiástica continúa su acompañamiento espiritual brindando mensajes de amor, aliento y esperanza para aquellas personas que, independientemente de tener o no necesidades materiales, necesitan consuelo. Es así como desde la distancia física brindan cercanía con Dios.
“Quiero invitar a todos a que nos unamos en oración, que no perdamos la esperanza, la fe y la caridad. Es un tiempo en el que estamos llamados a vivir nuestra fe unidos y a compartir el mensaje evangélico que Dios nos da para poder levantarnos y tener una oportunidad en medio de las necesidades. Guardemos la calma por medio de nuestra fe y aferrémonos a la esperanza de que un día saldremos triunfadores de esta emergencia. Que el señor bendiga a todos y nos guarde”, es parte del mensaje que el padre Fernando Emilio Álvarez Muñoz, director del Banco Diocesano de Alimentos y de la Pastoral Social, le envía a toda la población.