Iglesia presta asistencia y atención en salud a pueblos originarios del Vichada
Un total de 1000 atenciones gratuitas en salud brindó la brigada extramural humanitaria del Vicariato Apostólico de Inírida en el departamento del Guainía. Con esta jornada se atendió a más de 30 comunidades indígenas de las etnias piapoco y sikuani del bajo río Guaviare y etnias Piaroa por el río Orinoco.
Esta brigada logró remontar los caudalosos ríos Orinoco y Guaviare, logrando llegar no sólo con atención, promoción y prevención en salud, sino con medicamentos y apoyo alimentario con más de 1200 mercados entregados a lo largo de éstos dos ríos.
“De ésta manera, el vicariato apostólico logra desplazarse hacia comunidades originarias; donde el estado colombiano y la gobernación del vichada, muy pocas veces llegan. La caridad en la Iglesia Católica no tiene descanso ni fronteras ya que también se pudo compartir con 120 mercados a la comunidad de San Fernando de Atabapo en Venezuela”, señala un mensaje emitido por el Vicariato.
Según lo señalan, las zonas atendidas pertenecen al municipio de Cumaribo en el departamento del Vichada; atendiendo por el río Guaviare a población sikuani, piapoco y algunas pequeñas comunidades de curripacas. Por el río Orinoco Piaroas, algunas comunidades Piapoco y familias de la etnia Curripacas.
Este trabajo pastoral de acompañamiento a las comunidades, que siempre ha venido adelantando la Iglesia de Inírida, pero que se ha intensificado por cuenta de la pandemia, es realizado por un equipo de profesionales y voluntarios que a través de un proceso integral ofrecen atención de salud, seguridad alimentaria y acompañamiento espiritual.
“Esta labor ha tenido el acompañamiento de las hermanas Lauritas y los padres Ausberto y Benedicto quienes realizan su labor pastoral en medio de estas comunidades; y en comunicación, ya que ésta, se realizó en lengua propia, con un positivo balance de trabajo puesto que se cuenta con un equipo consolidado orientado por el médico, Octaviano Martín Abaumza y coordinado por el ingeniero Javier Quiñones, acompañados por tres auxiliares enfermería todas ellas pertenecientes a las comunidades indígenas”, significan.
Finalmente, en su mensaje advierten como estos pueblos originarios se ven enfrentados a grandes dificultades no solo por el aislamiento geográfico sino por el confinamiento producto del Covid-19. Adicional a esto observan “por ser víctimas de la violencia armada que por estos días de pandemia dejó dos jóvenes de la armada nacional asesinados, uno desaparecido y tres más heridos; hechos que desde el Vicariato lamentamos profundamente y denunciamos la manera cobarde como actúan las fuerzas violentas de la disidencia y el narcotráfico por el brazo uva del departamento del Vichada”.
Fuente: Of. comunicaciones Vicariato de Puerto Inírida