Recolección de alimentos de huertas caseras pertenecientes al proyecto SADER
El pasado 10 de agosto se llevó a cabo la recolección de producción de huertas caseras en Cartagena del Chairá, veredas La Primavera, Los Remansos y Los Espejos, como parte de las actividades del proyecto SADER del Secretariado Nacional de Pastoral Social / Cáritas Colombiana, el cual viene acompañando a las familias del municipio y fortaleciendo actividades agrícolas para el desarrollo económico y social de las comunidades.
Las huertas caseras se vienen trabajando desde el año 2018 y 2019, pero este año, dada la emergencia sanitaria a causa del Covid-19, se reforzó esta actividad con insumos, semillas y materiales de construcción, atendiendo la necesidad de las comunidades y familias que se acompañan.
El resultado de esta labor se evidencia en los procesos de recolección de la producción de las huertas caseras para autoconsumo y comercialización, además de los procesos de resiembra y autogestión por parte de las comunidades participantes del proyecto en la conservación de la seguridad alimentaria del territorio.
“La importancia de esto se centra en dos resultados. El primero, promover la seguridad alimentaria y soberanía mejorando las condiciones nutricionales y el segundo en generar procesos de comercialización enfocados en mejorar los ingresos de las familias por medio de circuitos de comercialización y mercados campesinos. Adicional, se ha identificado por medio de encuestas de seguimiento que las familias incluyen en su dieta alimenticia las hortalizas y vegetales con un 21,5 % seguido por las proteínas con 21,4 %”, aseguró Miguel Aguirre, especialista del SNPS/CC.
Las familias que participan en la actividad de agricultura familiar en el municipio de San Vicente del Caguán son 100, sin embargo, en esta ocasión participaron 4 familias desde sus parcelas. Los alimentos que se siembran son hortalizas y vegetales, los cuales tienen contenidos nutricionales importantes.
Para el especialista del proyecto, “el proceso de las familias para continuar y mantener sus huertas, radica en el compromiso de generar ciclos de resiembra, manteniendo las semillas de los productos ya cosechados y utilizándolas en nuevas parcelas e intercambio de semillas con personas de la comunidad o de otros municipios”.