Contexto
-El Secretariado Nacional de Pastoral Social/Cáritas Colombiana (SNPS/CC) y las Jurisdicciones Eclesiásticas se encuentran afrontando la crisis, lastimosamente ya sumamos dos sacerdotes fallecidos en la Diócesis de Tumaco: Juan Carlos Valencia y Juan Gerardo Triviño, no está confirmado el motivo de la muerte del primero sacerdote, pero hay probabilidad que haya sido por Covid-19. Es de resaltar que el SNPS/CC está implementando e hizo pública su Respuesta Estratégica Institucional ante la Emergencia Social por la pandemia.
-Hasta el 7 de mayo hubo 9.456 casos de COVID-19 en Colombia, y 2300 personas se habían recuperado, mientras que 407 habían fallecido.
-El Gobierno Nacional mediante Decreto 636 del 6 de mayo de 2020, extendió oficialmente la cuarentena hasta el 25 de mayo de 2020; departamentos sin casos reportados como Putumayo, Vichada, Vaupés, Guaviare, Guainía y Arauca podrán iniciar su reactivación económica bajo protocolo de bioseguridad.
-La secretaria de Transparencia de la Presidencia de la República, Beatriz Londoño, hizo un llamado a los alcaldes y gobernadores de todas las regiones, ante los altos riesgos de corrupción que pueden existir en la ejecución de recursos para atender la emergencia sanitaria por COVID-19.
–La capital del país sigue siendo la más afectada, hasta el momento se registran 3.599 contagiados. Luego se encuentran Valle del Cauca con 1.224 casos y Meta con 759. El 92.08% de los 8.959 casos hasta el 6 de mayo, que equivalía a 5.788, son pacientes que se están recuperando en su lugar de residencia, sin necesidad de estar en una clínica u hospital. 498 personas (7.92%) se encuentran hospitalizados.
-La situación en las cárceles continúa estando desbordada y se agrava conforme pasa el tiempo. Al 5 de mayo se han reportado 685 casos confirmados de Covid-19, en el centro penitenciario de Villavicencio hay 657 casos, en Florencia y la Picota 5 casos en cada uno de los centros; en Leticia y Guaduas 1, en cada una y en Picaleña 13.
-La Organización Nacional Indígena de Colombia ha reportado que hay 13 pueblos afectados, 45 casos confirmados, 15 por confirmar y 6 fallecidos.
-Las ayudas humanitarias en esta crisis no dan abasto; muchas personas se ven obligadas a ir a trabajar para lograr el sustento de sus familias; en algunas comunidades no se cuenta con agua, lo que esto más otras situaciones llevan a protestas y bloqueos, pero tristemente desde que empezó el simulacro de aislamiento en Bogotá y la posterior cuarentena en el país, 25 personas han perdido la vida durante protestas sociales, 92 han resultado heridas y 35 han sido detenidas.
-El impacto desproporcionado de la crisis por la pandemia de COVID –19 sobre las niñas y las mujeres en su diversidad en Colombia, sigue aumentando los casos de violencia intrafamiliar y VBG.
-El 30 de abril la Defensoría del Pueblo emitió la Alerta Temprana N° 018-2020 de Inminencia, “debido a la situación de riesgo que afrontan los territorios con presencia y accionar de actores armados no estatales y grupos armados de delincuencia organizada por cuenta de los efectos y las medidas adoptadas para afrontar la emergencia sanitaria derivada por la pandemia COVID-19”.
-La situación de orden público en el Cauca es tan grave que el 6 de mayo se realizó por parte de la Comisión Segunda del Senado, control político al Gobierno Nacional por situación de violencia en el departamento. Resaltamos preocupación por el desplazamiento forzado en la vereda Santa Ana en Guapi de 58 familias, 340 personas en total; además, se reportó el asesinato de otro líder social, el señor Ueslao Guerrero, en el municipio de Mercaderes, mismo municipio donde el 29 de abril se masacro al líder comunal Álvaro Narváez y su familia.
-Fue activado el plan de contingencia en los oleoductos Caño Limón-Coveñas y Bicentenario, para atender las emergencias ocasionadas por siete atentados ocurridos desde el pasado sábado en Arauca, Boyacá y Norte de Santander por parte del Ejército de Liberación Nacional-ELN-.
Dado que el problema del sub-registro de casos de infección por COVID-19 es un asunto que se presenta, con mayor o menor nivel, en prácticamente todos los países del mundo, y que en la mayoría no es posible incrementar la capacidad de testeo porque actualmente hay escasez a nivel mundial de pruebas (y de los insumos que se requieren para tomarlas), cada vez más se viene planteando por expertos la necesidad de hacer seguimiento a la pandemia mediante el indicador de “mortalidad en exceso”.
Este indicador consiste en comparar la mortalidad (por causas no violentas) en un mismo período de tiempo, por ejemplo: Marzo de 2020 Vs. Marzo en los años 2010 al 2019 (Propuesta de un mecanismo no estatal de seguimiento a la evolución del COVID-19. Mauricio Parra). En línea con esto, si bien el reporte nacional no refiere casos en el departamento de Arauca, hay comentarios en terreno que indican que se reportó una persona con el virus en Saravena.
En la región del pacífico, específicamente en Tumaco, Nariño, las medidas de prevención no se están cumplimiento y ese municipio tiene el mayor número de casos del departamento, con 102 casos registrados. Personas integrantes de comunidades y organizaciones que acompañamos como Pastoral en la zona rural de Tumaco han presentado dolencias de salud que dicen no vincularlas con el Covid-19, sino con dengue, por lo que no acuden a centros de salud, ni reportan oficialmente estas situaciones, este hecho nos debe alertar y debemos ver qué medidas podemos tomar al respecto.
Como lo reporta OCHA, los impactos en las regiones son cada vez más fuertes, el acceso humanitario en municipios como Cartagena, Ibagué, Santa Marta y algunos municipios de Norte de Santander, Santander y Putumayo, dado el decreto de toques de queda el fin de semana pasado, limito la movilidad y, además hubo restricciones de movilidad en el sur de Bogotá, como en Corozal, Salamina, Sahagún, o el Catatumbo, por bloqueos y protestas. Las necesidades y acciones humanitarias en salud, seguridad alimentaria, nutrición y medios de vida; como de protección; agua; saneamiento e higiene; educación; logística y coordinación se mantienen
Continúan la preocupación por la población migrante, sobre todo por los venezolanos y venezolanas que están en Colombia y quieren regresar a Venezuela, o que están en Ecuador o Perú y requieren entrar y pasar por Colombia para llegar a su país; esta situación ha llevado a que el departamento de Nariño tome más medidas al respecto, alertando la situación de los refugiados y migrantes.
