Diócesis de Villavicencio, misión y caridad
La Diócesis de Villavicencio, a través del Secretariado Diocesano de Pastoral Social, continúa brindando acompañamiento a las comunidades vulnerables y formación de la Red de Cáritas Parroquiales. En medio de la crisis, la Diócesis ha intensificado este apoyo a las familias vulnerables brindándoles alimentos a quienes más se han visto afectado.
“Nuestro objetivo con este servicio es llevar esperanza y paz a las familias, mitigar la necesidad de alimento de la gente y, asimismo, dar cumplimiento de la Misión de la Iglesia, con claridad en la importancia del servicio de la caridad”, asegura la hna. Elsa C. Salazar, subdirectora operativa del Secretariado de Pastoral Social y directora del Banco de alimentos Papa Francisco.
Con el servicio del Banco de Alimentos se ha logrado llegar a muchas de las parroquias que hacen parte de esta jurisdicción eclesiástica, cáceles y organizaciones que trabajan con adultos mayores; todo esto gracias a la ayuda de los párrocos, personas del grupo Emaús y voluntarios que se han vinculado activamente a esta misión de la Diócesis.
Para la hna. Elsa Salazar, “ha sido fundamental la articulación del Banco de alimentos a la asociación de bancos ABACO. Han realizado una excelente gestión y su apoyo ha sido importante. El Banco de alimentos de Bogotá también nos ha apoyado de manera significativa y esto ha permitido entregar más de veintiocho mil kilos de alimentos, entre más de 26.600 personas.
El acompañamiento espiritual también continúa desde los coordinadores de las Cáritas que llegan al Banco de Alimentos a llevar lo de su parroquia, a quienes se les brinda un mensaje de agradecimiento por su apoyo y una insistencia en focalizar las familias más vulnerables, al igual que la celebración de eucaristía y espacios de oración.
“Es hora de ser la esperanza, de hacer visible la caridad que nos urge en este servicio de Iglesia. Dóciles al Espíritu del Señor, empecemos a construir en conjunto estrategias sabias para apoyar a las familias más vulnerables en sus búsquedas de caminos de superación de la crisis social y económica que afrontamos. Con la fortaleza del Espíritu no podemos desfallecer y con la seguridad de que María permanece con todos nosotros, como en el cenáculo, avancemos con profunda fe y gran esperanza de construir el Reino, visible en una sociedad de hermanos justa, solidaria, fraterna, equitativa y en permanente cuidado de la casa común”, es el mensaje que deja la hna. Elsa Salazar, subdirectora operativa de la Pastoral Social.