El Miércoles de Ceniza invita a los creyentes a reflexionar sobre sus vidas, a emprender un camino de renovación espiritual. Este día marca el inicio de la Cuaresma, un período de 40 días de preparación espiritual para la Pascua, en el que también se desarrolla la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes, una de las iniciativas más emblemáticas de la Iglesia Católica en Colombia.
En su edición de 2025, la campaña renueva su compromiso con los más vulnerables, acompañando a los fieles en este tiempo de transformación y reflexión para fortalecer el espíritu fraterno, caminar juntos y construir una sociedad más solidaria. Este año, la iniciativa se enfoca especialmente en apoyar a las comunidades afectadas por desastres naturales y el conflicto armado, como Chocó, Arauca, Catatumbo y Cauca, territorios donde la violencia y la inequidad han dejado profundas heridas sociales y humanitarias.
Con más de cuatro décadas de historia, esta campaña ha sido un faro de esperanza para miles de colombianos. Surgida hace 44 años, como una respuesta de la Iglesia a la desigualdad y la pobreza, ha evolucionado para adaptarse a las necesidades de cada época. En 2024, los recursos recaudados se destinaron a atender emergencias antrópicas, desastres naturales y desplazamientos masivos, con una inversión de 609 millones que beneficiaron a 14.628 personas en 34 municipios del país. La asistencia humanitaria incluyó alimentos, medicamentos, kits de higiene y apoyo psicosocial, especialmente en zonas afectadas por desplazamientos masivos y crisis humanitarias.



La Fuerza Solidaria que Impulsa a Colombia
Este 2025, empezamos poniendo la mirada y nuestra fuerza operativa, en regiones como el Catatumbo, donde la violencia y la incertidumbre generaron, una crisis de grandes proporciones. La campaña demostró su capacidad de respuesta ante las emergencias, acompañando a las comunidades afectadas por el recrudecimiento de la violencia y los desplazamientos forzados, se atendieron emergencias por inundaciones en la región Caribe y Chocó donde los “Chalecos Vinotinto” de Cáritas Colombiana, llegaron para llevar ayuda y esperanza.
Por esta razón, la fuerza solidaria que impulsa a Colombia es un mensaje de esperanza. Un llamado a que todos seamos parte de esa unión, que mueve corazones y nos invita a compartir con los demás. En estos momentos de crisis, Colombia puede salir adelante si sumamos muchas manos dispuestas a colaborar y muchos corazones comprometidos con quienes enfrentan dificultades. La fuerza solidaria es el motor que nos inspira a pensarnos como un país unido, donde la búsqueda del bien común sea nuestra mayor motivación y el impulso para construir un país de equidad.



La Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes 2025 es una oportunidad para que todos los colombianos, sin distinción, se sumen a este esfuerzo de solidaridad. Las donaciones pueden hacerse a través de las parroquias, la página web de Cáritas Colombiana o las cuentas bancarias habilitadas para este fin. Cada aporte, por pequeño que sea, contribuye a transformar vidas y a construir un futuro más esperanzador para las regiones más golpeadas por el conflicto y la pobreza.
Como bien lo expresa el Papa Francisco, “la solidaridad no es un acto esporádico, sino una actitud permanente de compartir y caminar juntos”. En este tiempo de Cuaresma, la invitación es: ser peregrinos de esperanza, llevando consuelo y ayuda a quienes más lo necesitan.
La Iglesia, a través de Cáritas Colombiana y las diócesis locales, trabajarán en conjunto con las comunidades para brindar asistencia humanitaria, promover la reconciliación y fortalecer iniciativas que permitan a las familias recuperar su autonomía y dignidad.



El mensaje del Papa Francisco: Peregrinos de esperanza
En el marco de la Cuaresma y bajo el lema “Peregrinos de esperanza”, el Papa Francisco ha invitado a los fieles a reflexionar sobre el significado de caminar juntos hacia la justicia y la paz. En su mensaje para esta campaña, el Santo Padre recordó que “no podemos ser indiferentes ante el sufrimiento de nuestros hermanos, especialmente de aquellos que huyen de la violencia y la miseria”.
El Pontífice subrayó la importancia de la conversión a la sinodalidad, es decir, de caminar juntos como Iglesia, sin dejar a nadie atrás. “Ser peregrinos de esperanza significa escuchar, acoger y trabajar juntos por un mundo más fraterno”, afirmó. Este llamado resuena con fuerza en Colombia, donde la Iglesia sigue siendo un baluarte de esperanza para quienes quieren volver a empezar.
La Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes 2025 nos invita a ser solidarios, cada donación transforma vidas y le devuelve la esperanza a quienes la incertidumbre les ha cambiado la vida.
¡Súmate a esta causa! Dona en tu parroquia o a través de www.caritascolombiana.org en las cuentas habilitadas https://caritascolombiana.org/donar/. Como dijo el Papa Francisco, “la solidaridad es una actitud permanente de compartir y caminar juntos”. Hoy, Colombia necesita de tu generosidad. #SumateALaEsperanza #CampañaDeBienes2025.