El 23 de octubre, en el marco de la COP 16 se llevó a cabo el espacio ‘’Amazonía: Derechos Humanos y Biodiversidad a la luz de Laudato Si’’, un encuentro que reunió a líderes campesinos e indígenas de la región amazónica, quienes compartieron sus experiencias de defensa del territorio y la biodiversidad. La Red Eclesial Panamazónica (REPAM), organizadora del evento, facilitó un espacio de diálogo profundo sobre la interconexión entre la protección de la Panamazonía y los derechos de las comunidades que la habitan.
Pastoral Social Cáritas Colombia
La reflexión exaltó la importancia de la Amazonía como uno de los principales biomas del mundo y hogar de una de las mayores concentraciones de biodiversidad. Se subrayó que la selva amazónica es más que un recurso natural; en este inmenso territorio conviven comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes, cuyas vidas están intrínsecamente ligadas al bienestar de este ecosistema. La espiritualidad, los saberes ancestrales y las formas de vida de estos pueblos aportan una visión integral para el cuidado de la naturaleza, en sintonía con los principios de la encíclica Laudato Si del papa Francisco.
Durante el panel, los líderes compartieron sus vivencias y esfuerzos por proteger la Amazonía desde sus comunidades. Marleny Yucuma, líder campesina del departamento delCaquetá en Colombia destacó el trabajo de conservación que ha realizado su comunidad a través del fortalecimiento de la finca amazónica, protegiendo los ríos y los bosques circundantes; también resaltó el papel de la mujer como guardiana y protectora de las semillas, que son fuente de vida en el territorio. Estas iniciativas no solo promueven la viabilidad ambiental, sino que también fortalecen a las mujeres en la preservación de su cultura y tradiciones.
Miller Perdomo, campesino de San Vicente del Caguán, Amazonía colombiana compartió su experiencia en la reconversión ganadera, un proceso que busca armonizar las prácticas productivas con la conservación del territorio. Por su parte, Pablo Inuma Flores, líder indígena del pueblo Yine de Madre de Dios en Perú explicó los desafíos que enfrentan los pueblos indígenas en aislamiento voluntario y la importancia de recuperar los territorios ancestrales para asegurar su supervivencia.
Todos coincidieron en que proteger la Amazonía no solo es una cuestión ambiental, sino también una cuestión de justicia social y de respeto por los derechos humanos. Las comunidades que habitan la selva amazónica son guardianas del conocimiento y las prácticas que han permitido preservar este bioma durante siglos; su lucha por la defensa del territorio es también una lucha por la vida misma. En este sentido, la Iglesia ha jugado un papel crucial, acompañando y apoyando a estos pueblos en sus procesos de defensa y protección territorial; el llamado a un cuidado integral de la casa común.
Este diálogo sobre la Amazonía resuena profundamente con el tema central de la COP 16: Paz con la naturaleza. La Amazonía es fundamental para el equilibrio ecológico global y el bienestar de todos los seres vivos. La diversidad biológica de la selva no puede ser separada de los derechos y la supervivencia de los pueblos que la han custodiado durante siglos. La COP 16 nos invita a reflexionar sobre cómo las políticas de conservación de la biodiversidad deben estar profundamente vinculadas con el reconocimiento de los derechos de las comunidades indígenas, campesinas y afrodescendientes que habitan en estos territorios. Elconocimiento ancestral y la conexión espiritual con la tierra son esenciales para encontrar soluciones sustentables que aborden tanto la crisis climática como la crisis de biodiversidad.
La defensa de la Amazonía y sus pueblos no es solo una cuestión ambiental, sino una responsabilidad moral y ética hacia el cuidado de la casa común. La COP 16 sobre la biodiversidad se convierte en un escenario clave para amplificar estas voces, reconociendo que la biodiversidad y los derechos humanos están intrínsecamente entrelazados, y que proteger la vida en todas sus formas es un llamado urgente que no podemos ignorar.
Por: Equipo de comunicaciones REPAM
